No lo entiendo: soy el tio más guapo del mundo, el más amable, el más enamoradizo, y además soy culto y educado. Y sin embargo no encuentro a la mujer de mis sueños.
No lo entiendo: las relaciones son mas difíciles ahora que a pesar de las supercomunicaciones de internet y los smartphones en el bolsillo; parece que nadie dedica el tiempo a ENAMORAR, las conversaciones se han convirtieron en pobres textos, los argumentos en simples llamadas y los sentimientos en vanas indirectas. Es como si la palabra AMOR se utilizara fuera de contexto; la inseguridad en una forma de pensar, los celos en hábitos, engañar en accidente y ser lastimados, es ahora...algo natural, como si nadie respetara ni supiera respetar, como si nadie supiera llevar una relación. ¿Cuántos ya estamos hartos de mentiras?, ¿por qué será que parece que el amor acaba teniendo fecha de caducidad?
Y eso lo digo yo, que no me gusta hablar de mi, y que prefiero que me descubran quien soy y cómo soy. ¡Que lo intenten, por favor!, si no, nunca descubriréis quien soy: un pequeño dios de paso....¿quién sabe, modestia aparte?,...id y esforzaros en descubrirlo, pues.
Algunas dicen que el físico no es importante, pero no cabe duda de que es lo primero que les entra por los ojos. Pero es que muchas veces olvidamos aquello de "el físico atrae, pero la personalidad enamora". ¿Cuántas de vosotras en vez de fijaros tanto en el físico, y a veces en su defecto en el dinero, no sois capaces de ir más a fondo, y fijaros en lo más importante: la personalidad que hay dentro de un hombre?. Entonces no sé, chicas, ¿nos seguiremos mintiendo a nosotros mismos?. Podríamos decir que sí, que el físico es importante,....pero no lo es todo. Lo más importante es el hombre que yace dentro de ese envoltorio que llaman físico, y que hay que intentar descubrir.
Desde luego no me atrae nada ninguna de esas guaperas creídas y prepotentes que se piensan que lo saben todo y que se ha comido el mundo y se sienten como las reinas de todo: ....mejor que se sigan mirando en el espejo de su propio ego y que le saquen todo lo que puedan a los tontos,....yo no soy tio de perder el tiempo con ese tipo de fauna y tampoco para hacerselo perder a ellas que conmigo es en vano. Tampoco me gustan esas chicas que son pasivas, que no responden, que no intentan nada, que se acobardan en su propia timidez o en sus absurdos complejos; las prefiero más atrevidas, comunicativas, esforzadas en construir la relación, pero también que sepan respetar, ser leales y corresponder a todo ese interés que se muestra por ellas. Un algo especial tiene una mujer, cuando interesa a un hombre, pero si no sabe corresponder, es un feo obstáculo a superar, que desánima y decepciona incluso al que tiene las mejores intenciones.
No es que intente buscar a nadie en concreto, aunque sé que para encontrar, hay que buscar, pero a veces en el mejor de los casos viene solo, sin avisar. A mi me gustaría que apareciera esa mujer que fuera tan especial para mí y yo para ella, que fuera algo patente y demostrable, que el sueño del amor, de la complicidad, del compañerismo,...fuera algo que ambos supieran convertir en realidad, porque sin duda alguna es una tarea mútua y reciproca. Aviso: por mi parte no me faltan recursos, pero tampoco soy capaz de entregarme a mujeres ingratas, pobres de espiritu, carentes de generosidad e incapaces de tolerar un mínimo de defectos (porque todos tenemos algunos).
Busco, pues: una mujer guapa, por supuesto, con las ideas claras y la mente sana. Inteligente y divertida con su punto de ironía. Una mujer con quien reír mucho y llorar muy poco; una mujer con la que compartir y disfrutar mucho, y sufrir muy poco. Una mujer que pillara mis pensamientos y sea protagonista voluntaria y entregada de mis sueños. Una mujer a quien cuidar, pero que también sepa cuidarme cuando yo lo necesite porque a veces en esa dura e ingrata lucha por la vida también flojeo por mucho que me esfuerce. Una mujer que me enamore y sepa tenerme siempre enamorado en todos los aspectos, y no solo en saber tenermela tiesa con frecuencia. Una mujer que no hace aparentar lo que lo que realmente no es, que no se deja marcar por la sociedad en la que vivimos donde los valores humanos se están perdiendo y cada vez crece más el egocentrismo, la superficialidad, la hipocresia, la deshumanización, y la falta del esfuerzo. Una mujer sincera conmigo, que nunca me mienta aunque las verdades tengan que ser amargas, que me respete, y que me sea leal aunque alguna vez tengamos alguna desavenencia. Una mujer auténtica, profunda, con ganas de disfrutar a vida junto a mi, con ganas de sonreirme todos los días...Una mujer que no me tome por un muñeco, porque tengo mis propios sentimientos, y para jugar a muñecos, ya tenéis las barbies guardas en el baúl. Una mujer que no busque dinero en mí porque apenas no tengo, y además mis tesoros no se miden en dinero. Una mujer que no busques marearme ni confundirme, que para eso mejor que se vaya al Tibidabo, ya que no soy tonto y me doy cuenta con mucha facilidad cuando intentan manipularme o cuando engañarme por no decirlo de otro modo.
¿La encontraré?. Si tengo que creer que la esperanza es lo último que se pierde, también tendré que creer que alguién así sí existe.
Y el alcohol y el tabaco es siempre un problema para mí, ¿quién disfruta de verdad besando a una borracha?, ¿a quién le gustaría estar morreando un cenicero?. Así que las viciosas, lo siento, no estás en la lista de lo que estoy buscando.
¡Ah!, y otra cosa más: yo no soy George Clooney. Yo cuando amo a una mujer, es que la amo de verdad, y aunque tengo un espiritu muy aventurero, en realidad soy un tipo muy familiar, muy de hogar. No me van las tonterías, y con ello digo que con una sola mujer me basta.
En fin, una reflexión que quería compartir con vosotros, aunque sé que tendría muchas más cosas que decir, pero se me han quedado en el tintero. Naturalmente he hablado desde mi perspectiva de hombre. ¿Qué pensaís vosotros?, ¿es demasiado lo que pido, o voy con razón?.
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